Una vida en libertad va acompañada de un abandono de los caminos conocidos y trillados.
De ella surgen posibilidades inimaginables... de repente sientes una gran ligereza, una profunda alegría de vivir y te dejas llevar por una sonrisa interior.
¿Estás dispuesto a asumir la responsabilidad para seguir el camino de la libertad?
En el centro del trabajo de la asociación estás tú y tu relación consciente, respetuosa y responsable con la tierra y el cosmos ...
De esto surge una vida pacífica y alegre en conexión con todo el ser para el mayor bien de todos. En estos tiempos podemos apoyar mejor a la tierra y a nuestros semejantes a través de una vida en alegria.
La asociación imparte conocimientos sobre las leyes universales y las interrelaciones relacionadas con ellas para acompañarnos en el camino hacia nuestra propia verdad. Descubrimos nuestros potenciales y nuestros poderes inherentes para recorrer el camino de una vida autodeterminada en libertad. Este camino no está predefinido, sino que surge a través de la percepción consciente del momento mientras se camina.
Al implicarte personalmente y abrirte, la asociación también crece.
Hay una gran fuerza en la comunidad. Juntos creamos un fuerte campo de libertad y de alegría.
¡Es bueno que eres parte de nosotros!
Participar (Descargar pdf)
Benditos seamos por bailar en este suelo
Con el ritmo de los santos para llevar el sonido
Rezamos por la Tierra
Por los que están por venir
Que caminen en la belleza
Y recuerden su canción
Recuerda por qué has venido aquí
Recuerda que tu vida es sagrada
Recuerda por qué has venido aquí
Recuerda que tu vida es sagrada
(De la canción "Blessed we are" de Peia)
Veo una nueva tierra, ¡hago todo nuevo! Los seres humanos reconocemos que somos una sola familia humana. Cada individuo es valioso y hace una importante contribución para que nos desarrollemos más como humanidad. Vivimos en paz y somos conscientes de que todos estamos entrelazados de forma mágica. Simpre cuando me encuentro con otra persona, de verdad me encuentro conmigo mismo.
El amor propio es la clave. Valoro mi vida y me doy cuenta de que es un gran regalo vivir en esta tierra. Tomo conciencia de mi poder inherente y vivo mi naturaleza.
Solamente cuando me valoro a mí mismo, vivo mi propia naturaleza, mi entusiasmo y mis talentos, puedo también valorar y amar a mis semejantes. Sí, sólo reconozco la magia de la tierra en cuanto soy consciente del gran regalo que es que me permitan vivir como un ser humano ahora. Nada puede darse por sentado y la gratitud abre el camino.
Como familia humana, vivimos en armonía con la tierra y con todos los seres vivos de este planeta. Somos iguales, nos encontramos en el mismo nivel, nos reconocemos en la vitalidad del otro y en nuestra singularidad.
Tomamos en agradecimiento, todo lo que necesitamos para satisfacer nuestras necesidades, pero también somos conscientes en cuanto éstas se cumplen. "Nunca es poco, lo que es suficiente" escribió una vez Séneca.
La libertad es la estrella que brilla en la nueva tierra. Nos desplegamos, libres y sin límites, abriendo el espacio para nuestro crecimiento espiritual. Cada uno asume la responsabilidad total de sus actos y así construye los cimientos de la libertad.